Uno de los aspectos con los que tenemos que ser muy cuidadosos con respecto a la educación es la construcción de la identidad femenina, es decir, no establecer relaciones de dominio que supediten un sexo a otro, sino incorporar en igualdad de condiciones las realidades y la historia de las mujeres y de los hombres para educar en la igualdad desde la diferencia. A este aspecto de la educación se le denomina coeducación, ésta trata de construir personas al margen de roles y estereotipos.
Esta película nos ha parecido muy buena para trabajar la coeducación ya que en ella se menciona “Como deben ser los personajes”, es decir, los estereotipos, pero todos sus personajes rompen con ellos. Por ejemplo, según la película una princesa debe tener un rol específico y ser instruida para ello, dar ejemplo, tener su vida planificada, perseguir siempre la perfección, prepararse toda la vida para el matrimonio, llevar ropa incomoda…pero Mérida (la protagonista) no quiere tener deberes, no quiere contraer matrimonio, quiere ser libre, tira con arco, escala montañas, monta a caballo, es inconformista, lucha por cambiar un destino que se le ha impuesto y por que la comprendan… ¡ansía libertad!
Otro aspecto que nos ha parecido muy importante es que la Reina no es la sombra del Rey, ella es muy inteligente y la encargada de tomar las decisiones importantes para la familia y el reino en general. Por otro lado el Rey se toma las cosas a gracia e incluso es el que consiente a sus hijos, pero hace algo desde mi punto de vista avanzado ya que tiene comportamientos como hacer de intermediario entre madre e hija y regalarle a Mérida un arco, que es un regalo que en otras películas sería “inusual e impensable” para una princesa.
Para concluir con este apartado, hemos de decir que no todos los estereotipos de ésta película son adecuados, ya que hay algunos comportamientos que no son para nada dignos de imitar, pero eso no lo vemos como una debilidad, sino como una fortaleza porque no queremos hacer de nuestros alumnos unas maquinas repetidoras de actitudes y comportamientos, queremos hacer de ellos unas mentes pensantes y críticas que sean capaces de distinguir, con nuestra ayuda al principio y poco a poco solos, entre lo que está bien y mal , y sean capaces de formar su propia personalidad y su comportamiento a raíz de los pensamientos y las conclusiones que , a actividades como ésta, ellos mismos han generado, eligiendo libremente lo que ven adecuado y lo que no, y siendo conscientes de las consecuencias que puede tener en su vida.
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